ACTIVIDAD: Jornada de senderismo por Las Arribas del Duero
FECHA: 29 de mayo de 2011
LUGAR: Villardiegua de la Ribera
CONVOCATORIA: Plaza de las Paneras
HORA: 09:30 horas
PARTICIPANTES: 20 personas y la perra “Neska”
MEMORIA: Aunque a la hora convenida llovía con cierta intensidad los participantes, guiados por José Antonio (Petu) y Elisa, iniciamos la marcha por los caminos de la Llagona y Gozavía con dirección a la laguna y lavaderos de La Saz, recorrido de senderismo perfectamente señalizado. Al llegar a la zona de “cortineo” Petu nos explicó los diferentes espacios naturales del término municipal y sus usos, complementado con unas indicaciones para la audición y reconocimiento de los distintos sonidos que en ese momento emitían las aves; por su parte Elisa nos informaba de las especies vegetales que nos íbamos encontrando (orquídeas, serapias, cornicabras…). En breve llegamos a la laguna y, un poco más adelante, a los tradicionales lavaderos de La Saz, una sencilla construcción circular de bloques de granito donde las mujeres del pueblo aprovechaban la calidad de las aguas para lavar la ropa. En la actualidad se encuentran abandonados y la vegetación se ha apoderado de lugar.
Caminando unos seiscientos metros llegamos al mirador de La Finestra, espectacular mirador sobre Las Arribas, lugar elegido para un aperitivo gracias a la generosidad de Romu, que puso a disposición de los excursionistas la excelencia de su embutido casero. Tras el descanso –y saludar a los hermanos portugueses que estaban celebrando una romería en la ermita de São Joanico de Aldeina Nova, frente al lugar donde estábamos– nos dirigimos hacia el paraje de Rita la Rodera, trayecto en el que tuvimos la oportunidad de avistar el vuelo de la cigüeña negra, águila calzada, milano negro… A mitad de camino se encuentra la fuente de la Huerta, que “Neska” aprovechó para darse un refrescante baño después de haber correteado sin parar durante toda la mañana.
En Rita la Rodera, lugar donde hace poco tiempo se había realizado la bendición de campos, disfrutamos de una comida de hermandad y posterior tertulia para, después y ya en coche, dirigirnos hacia Peña Redonda y la ermita de Sanamede.